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Plantando calabacín redondo: del huerto a la mesa

    Plantando calabacín redondo: del huerto a la mesa

    El calabacín redondo es una deliciosa variedad de calabacín que se caracteriza por su forma esférica y su sabor suave y delicado. Cultivar calabacín redondo en tu huerto es una excelente manera de disfrutar de esta hortaliza fresca y nutritiva en tus comidas. En este artículo, te enseñaremos todo lo que necesitas saber para plantar calabacín redondo, desde la siembra hasta la cosecha, para que puedas disfrutar de tus propios calabacines frescos en la mesa.

    Plantar calabacín redondo: preparación del suelo

    Antes de plantar tus semillas de calabacín redondo, es importante preparar adecuadamente el suelo de tu huerto. El calabacín es una planta que prefiere suelos ricos en materia orgánica y bien drenados. Para preparar el suelo, puedes añadir compost o estiércol bien descompuesto y mezclarlo con la tierra existente para enriquecerla. Asegúrate de que el suelo esté suelto y libre de malas hierbas antes de sembrar tus semillas.

    Plantar calabacín redondo: siembra

    La siembra de calabacín redondo se realiza mejor directamente en el suelo, ya que las plantas no toleran bien el trasplante. Siembra tus semillas a una profundidad de aproximadamente 2-3 centímetros y asegúrate de que estén espaciadas al menos a 60-90 centímetros de distancia entre sí para permitir que las plantas se desarrollen adecuadamente. Riega bien las semillas después de sembrarlas para asegurar una buena germinación.

    Plantar calabacín redondo: cuidados y mantenimiento

    Una vez que tus semillas hayan germinado, es importante proporcionarles los cuidados adecuados para asegurar un buen crecimiento y desarrollo de las plantas. El calabacín redondo necesita ser regado regularmente, especialmente durante los períodos de sequía, para asegurar un buen desarrollo de los frutos. Además, es importante fertilizar las plantas con un fertilizante equilibrado rico en nutrientes para promover un crecimiento saludable.

    Plantar calabacín redondo: cosecha y almacenamiento

    El calabacín redondo suele estar listo para ser cosechado aproximadamente 50-60 días después de la siembra, dependiendo de las condiciones de crecimiento. Para cosechar tus calabacines, simplemente córtalos con cuidado de la planta con un cuchillo afilado. Es importante cosechar los calabacines cuando aún están tiernos y firmes para disfrutar de su mejor sabor y textura. Los calabacines redondos se pueden almacenar en el refrigerador durante varios días, pero es mejor consumirlos lo antes posible para disfrutar de su frescura.

    En resumen, plantar calabacín redondo en tu huerto es una forma gratificante de disfrutar de esta deliciosa hortaliza fresca en tus comidas. Sigue estos consejos para plantar, cuidar y cosechar tus calabacines redondos, y pronto estarás disfrutando de tus propias cosechas en la mesa. ¡A disfrutar!