La achicoria es una planta de la familia de las Asteráceas que se cultiva comúnmente por sus hojas amargas y saludables. Es una excelente opción para cultivar en casa, ya que es fácil de cuidar y requiere poco mantenimiento. En esta guía, te enseñaremos todo lo que necesitas saber para plantar achicoria en tu jardín o huerto urbano.
Plantar achicoria: ¿Cuándo y cómo hacerlo?
La achicoria se puede plantar tanto en primavera como en otoño, siempre y cuando se eviten las temperaturas extremas. Para sembrar achicoria, es importante elegir un lugar soleado con suelo bien drenado y rico en materia orgánica. Antes de plantar, asegúrate de que el suelo esté bien preparado, eliminando las malas hierbas y abonando si es necesario.
Para sembrar las semillas de achicoria, simplemente entiérralas a una profundidad de unos 2-3 cm y mantén el suelo húmedo hasta que germinen. Una vez que las plántulas hayan crecido lo suficiente, puedes trasplantarlas a su ubicación final, dejando unos 30 cm de espacio entre cada planta.
Cuidados básicos de la achicoria
La achicoria es una planta resistente que no requiere muchos cuidados una vez establecida. Asegúrate de regarla regularmente, especialmente durante los períodos de sequía, para evitar que las hojas se vuelvan amargas. También es importante mantener el suelo libre de malas hierbas, ya que estas pueden competir con la achicoria por los nutrientes del suelo.
Además, puedes fertilizar la achicoria cada 4-6 semanas con un abono equilibrado para promover un crecimiento saludable. Si notas la presencia de plagas o enfermedades, como pulgones o mildiu, puedes tratarlas con insecticidas o fungicidas naturales para proteger tus plantas.
Cosecha de la achicoria
La achicoria es una planta de rápido crecimiento que se puede cosechar en tan solo 3-4 semanas después de la siembra. Para cosechar las hojas de la achicoria, simplemente córtalas con unas tijeras o un cuchillo afilado, dejando unos 5 cm de tallo para que la planta pueda seguir creciendo.
Puedes cosechar la achicoria de forma continua, cortando las hojas más grandes y dejando las más pequeñas para que sigan creciendo. De esta manera, podrás disfrutar de hojas frescas y crujientes durante toda la temporada de cultivo.
En resumen, plantar achicoria en casa es una excelente manera de disfrutar de hojas frescas y saludables durante todo el año. Con los cuidados adecuados y un poco de paciencia, podrás cosechar tus propias hojas de achicoria en poco tiempo. ¡Anímate a cultivar esta deliciosa planta en tu jardín o huerto urbano y disfruta de sus beneficios para la salud!